Rudd-O.com
Un fanático de la verdad. Linux, software libre, cultura, voluntarismo y cypherpunk. Desde 1999.
No es broma. Hay más castigo para quien se dice "ofende al Estado" que para quien calumnia a una persona.
Las órdenes que toman... no las apuntan. Y sin embargo nunca se equivocan.
La única diferencia entre ellos es si son violentos directamente o prefieren delegar la violencia a un tercero.
Artículo sindicado en Tecnodatum hace dos semanas.
Una animación fantástica que explica de qué se trata la libertad y el voluntarismo.
El reino animal tiene muchas sorpresas para nosotros, y cada día descubrimos una nueva a través de la biología. Hoy descubrimos el misterio tras el orgasmo femenino, y la verdad tras la supuesta decencia.
Descubriremos nuestro fracaso social -- junto con los orígenes del mismo -- con la siguiente reflexión moral.
Nunca falta el metiche que quiere castigar (o, más bien, que el Estado castigue) a los que no usan cinturón de seguridad, a los que fuman, a los que portan armas, a los que se visten zarrapastrosamente, a los que no pagan impuestos. Estos metiches están equivocados; son perversos; son inmorales.
Una persona está obligada, en discurso público, a hacer honor a la verdad, a ser fiel a la realidad verificable por todos. Una agenda jamás puede pretender redefinir la verdadera y objetiva moral. El verdadero racionalista no se aferra ni salta a conclusiones, sino a principios y observaciones.
Los tarados que programaron el juego se comen la camisa.
A veces, la mitad de la medicina tiene el doble del efecto. He aquí el porqué.
Frustrados con la (lógicamente) poca aceptación de sus estafas, los homeópatas han recurrido a engañar a la gente por e-mail. He aquí un correo de uno de estos farsantes, desmentido punto por punto.
Hace algunos años, el inigualable Carl Sagan desarrolló un juego de "reglas de buen cubero" para separar la verdad de la chatarra. Aquí están.
¿Recuerdas cuando eras pelado y jugabas con canicas de vidrio? Bueno, pues, así se fabrican.
Las reglas sin sentido sí tienen sentido... si las miras desde otro ángulo. He aquí ese ángulo.
La mitad de la población del país más poderoso en el planeta rechaza la evolución y cree en Satanás. Es hora de que la razón controle el debate. Y la forma en la que lo lograremos es a través del lenguaje.
Hemos estudiado el comportamiento de la gente por más de cien años usando teorías microeconómicas. Hoy sabemos que esas teorías son falsas.
Para aquellos que necesiten convertir una carpeta o una parte de sus sitios Plone en sitios Web completamente distintos.