Cómo se le sonsaca el poder adquisitivo a una nación

publicado 21/06/2016, Última modificación 22/06/2016

Una historia corta de un fraude legal.

El plan es sencillo y cualquiera que sepa de historia (latinoamericana o romana) lo conoce bien:

  1. Crear una moneda paralela, totalmente nueva, que inicialmente por decreto correrá a paridad fija con la moneda vigente (en el caso del Ecuador, es el dólar, y la paridad is 1:1).
  2. Obligar a ciertas personas a usar esa moneda.  Eso fallará necesariamente, porque la gente sabe que el dólar (la moneda de curso) es una moneda fuerte, y por tanto prefiere tener dólares sobre tener moneda paralela.
  3. Ofrecer un incentivo perverso para usar esa moneda.  Por ejemplo, hacerla más barata que el dólar mediante un sobornoincentivo legal — digamos, una tasa inferior de impuestos.
  4. Esperar a que bobos y corruptos caigan en el truco ofrecido en el punto 3; con el paso del tiempo, la gente decente también se verá obligada a cambiar sus dólares por la moneda paralela.
  5. Cuando la mayoría de dólares hayan sido reemplazados y la población tenga casi únicamente esa moneda paralela que no tiene ningún valor fuera del país, simplemente toca decretar que el dólar ya no será usado (posiblemente decretando una prohibición contra el uso del dólar, así como se hizo en Venezuela y en Argentina).
  6. Devaluar la moneda paralela con respecto al dólar.

Ahorita estamos en el paso 4.

Aquí está el detalle del que no he visto a casi ningún ecuatoriano percatarse:

Los esbirros del Estado han admitido por medio de sus acciones que su moneda inventada es menos valiosa que el dólar.  ¿Cómo lo sabemos?  Pues porque ellos han decidido, en efecto, pagarle 2% de cada transacción a todo usuario de su moneda inventada.  Si ellos están dispuestos a pagarle a la gente para que cambien sus dólares por la famosa moneda paralela que se inventaron, eso quiere decir que ellos saben muy bien y muy clarito que los dólares son más valiosos que la moneda que se inventaron, y que es mejor quitárselos a la gente para quedarse con los dólares, dándole a la gente una moneda inferior.

No digo "inferior" porque se me ocurre de la nada.  Es inferior para el pueblo, y ellos lo saben.  Esa moneda paralela está diseñada para que ellos tranquilamente pueden inflarla y devaluarla cuando se les pegue la regalada gana, negándole al pueblo su poder adquisitivo mientras ellos se quedan con los dólares que ganan poder adquisitivo relativo a la moneda paralela.  Hasta el más grande bobo de la yuca se acuerda cómo era la vida con el Sucre.  Garantizado que la cosa será bastante peor con un sistema con el que, para inventarse "dinero nuevo", ni siquiera tienen que imprimir billetes — sólo basta digitar unos caracteres en un computador.

Gato por liebre.  Hay que ser tonto (o ser infinitamente capaz de engañarse a uno mismo) para no darse cuenta de que esto no es más que la repetición del fraude de la Conquista: toma bolitas de vidrio, dame oro... si no quieres darme oro, déjame te engaño con más vidrio.  Y al que no le guste este negocio fraudulento, de momento todo bien, pero a futuro, pues señor usté tiene toda la razón pero igual va preso.

Es así como un Estado le roba a la gente su poder adquisitivo y su derecho de protegerse contra ese robo.  Y como es ya es tradicional en Banania, esta gran estafa es 100% legal.

Puede que la historia no se repita, pero ciertamente rima.


Actualización: existe la posibilidad de un peor desenlace, según nos explica Alfredo Adum Ziadé.  No dejen de ver el video.


Sano consejo con cariño y desinteresado: ni bien tengas la oportunidad, compra bitcoins y guárdalos en un lugar bien seguro.  Te serán muy útiles una vez que la economía ecuatoriana haya pasado la etapa de colapso que se viene.  Ojo: cuidado con comprar OneCoin o cualquiera de esos esquemas pirámide.